
“El lugar o el medio de la realización no es ni la mente ni la materia, sino ese reino intermedio de realidad sutil que sólo puede expresarse adecuadamente mediante el símbolo”.
Carl Jung, Psicología y Alquimia

Mi no-tan-inespersada historia de amor con lo transpersonal
Me encontré con la psicología transpersonal hace unos años mientras pasaba por algunas experiencias dolorosas. Encuentros con la muerte y una crisis de edad me dejaron en un estado psicológico difícil de navegar. Perdí interés en lo que me rodeaba; Los valores y objetivos que creía que me definían perdieron su atractivo y me sentí sin propósito, vacía y sola. Busqué ayuda para hacer algunos cambios, empezando por cómo abordaba mi carrera y cómo manejaba mis emociones. El yoga era ya mi ejercicio sostenible y comencé a explorar la meditación y el "mindfulness". La terapia de conducta clásica rapidamente evolucionó a una práctica psicoespiritual, que me puse a explorar y que me llevó a mis estudios en Alef Trust y a la decisión de continuarlos sin las distracciones de la vida corporativa. Tengo la suerte de poder tomarme un tiempo libre para estudiar e investigar y tengo la intención de aprovechar al máximo mi transición hacia la “madurez” redescubriendo formas más creativas de vivir. Los estudios transpersonales ofrecen un marco que funciona para mí, un espacio donde se mezclan la teoría y la experiencia. Con una mente abierta y un poco de discernimiento, crean un estado de ambivalencia donde no existe el “esto si... esto no”. De todo lo que he aprendido en mi primer año en Alef Trust, quiero seguir expandiendo la práctica integrativa. El enfoque multidimensional del aprendizaje integral me ha recordado cómo florecemos en la periferia, reemplazado la sensacion de separación por interconexión. Estoy recuperando el espíritu creativo que sacrifique por una carrera practica y años jugando a ser "Londoner" . Me estoy despertado al vacío de la vida urbana, su perspectiva narcisista y la constante necesidad de logros, y busco algo más simple. El conocimiento y la mente se sobrestiman hoy en día; convirtiendo la razon en una maestra condescendiente sin un ápice de imaginación. La intuición no disminuye el intelecto sino que lo mejora, y cuando trabajan juntos en equilibrio,vemos el mundo con el entusiasmo de un niño de tres años. Este concepto me cambió la vida y que he decidido compartirlo con la esperanza de que pueda inspirarte. Estas paginas evolucionan conmigo y no tengo una dirección clara, pero he aprendido a confiar en el proceso, sabiendo que el camino eventualmente se revelará.

Un poco de Psicología Transpersonal
Olvidé lo divertido que es reflexionar sobre el misterio de la existencia. Preguntas como "¿Quién soy yo?" y "¿Por qué estoy aquí?" son la base de una infinidad de mitologías, filosofías y religiones y, potencialmente, los principales impulsores de la evolución de la conciencia. En las culturas occidentales, los paradigmas seculares de existencia provienen de la revolución científica del siglo XVII. Este movimiento tomó a los filósofos griegos antiguos como base de un camino hacia el conocimiento basado en la razón. La ciencia del siglo XVII pretendía descifrar "El Misterio" mediante estudios interdisciplinarios subrayados por sistemas lógico-matemáticos que pudieran modelar la realidad física. El debate de la época fue entre los discípulos de Platón, que sostenían puntos de vista esencialistas, y los de Aristóteles, que sostenían puntos de vista empíricos. Los empiristas ganaron y la ciencia empezó a centrarse en los fenómenos naturales regidos por las leyes de la física, acontecimientos que podían modelarse y replicarse lógicamente mediante la experimentación. El método científico rompió lentamente con las humanidades, despreciando la metafísica como supersticiones de mentes inferiores. Los avances de la Revolución Industrial influyeron aún más en el mundo científico, que comenzó a trabajar hacia una teoría del todo, creando un sistema de creencias materialista que defendía modelos deterministas de existencia basados en la evolución de Darwin .
La psicología, como rama emergente de la ciencia dedicada al estudio de la mente, quedó atrapada entre la ciencia materialista y la metafísica y, al no poder salvar la brecha filosófica, terminó centrándose en áreas que permitían la experimentación objetiva, como el comportamiento y el desarrollo cognitivo. Sin embargo, a medida que la investigación científica mostró interés en la conciencia y comenzó a estudiar la experiencia subjetiva desde una perspectiva cognitiva, afirmando que era un epifenómeno de la actividad cerebral que podía asignarse a la percepción, los dilemas metafísicos regresaron. Hacia finales del siglo XX, quedó suficientemente claro que las opiniones naturalistas y los métodos de investigación empíricos, por sofisticados que fueran, no eran suficientes para dar cuenta de fenómenos subjetivos complejos y las líneas entre superstición y ciencia comenzaron a desdibujarse. En física, descubrimientos como la naturaleza dual onda-partícula de los cuantos y sus propiedades de no localidad y entrelazamiento desafiaron el determinismo darwiniano. La relatividad de Einstein expuso la cualidad de la experimentación dependiente de la observación. En matemáticas, el teorema de Gödel refutaba cualquier posibilidad de crear sistemas formales completos que evitaran la autorreferencia y la paradoja. Una mentalidad corporativa en las ciencias naturales, ahora una tarea costosa que depende de políticas de financiación, comenzó a sembrar dudas sobre la objetividad de la investigación académica y, en los estudios de la conciencia, surgieron visiones posmaterialistas para desafiar lo que se consideraba un dogma cientificista. La psicología transpersonal es una de esas visiones. Fundamenta el análisis de la experiencia subjetiva en el terreno científico, y a la vez reconoce el misterio de la existencia con todas sus implicaciones metafísicas y, por lo tanto, acepta dimensiones de conciencia más allá del desarrollo cognitivo y la percepción sensorial. Aunque inicialmente se basó en una filosofía perenne que favorecía una conciencia sin contenido estudiada a través de ideales místicos y la neurociencia. Ahora incorpora modelos dinámicos complejos y dualismos metafísicos para explorar la conciencia como una cualidad inherente, donde la mente, la materia y estados del ser más abstractos interactúan y participan activamente en el proceso evolutivo de la vida. Haga clic para referencias
Abrazando a la Diosa
Durante el próximo año, voy a conectar con mi bohemia interior, reconectando con ese instinto olvidado que nos ayuda a crear nuevas formas de ser. Mientras continúo con mis estudios y evoluciono mis prácticas, este espacio se convierte en mi nuevo proyecto creativo donde comparto mis aprendizajes. Mi propio "caso práctico” sobre los beneficios de transformación integrativa potencialment expandiendose a un proyecto de investigación para mi curso. ¡Os mantengo informad@s!

La diosa que yace en el caos
El Ser es tan misterioso como la propia existencia. Los budistas lo describen como una sensación de observar y ser observado bajo una conciencia sin contenido, desprovista de forma conceptual y llena de amor ilimitado. El Buda lo llamó Anatta, una manifestación momento a momento de una esencia que está al mismo tiempo en todas partes y en ninguna, una claridad luminosa que existe más allá de los conceptos pero que, paradójicamente, los requiere para ser expresada. El apego a la expresión conceptual, a ideas e identidades fijas, es lo que podemos llamar el ego, la narrativa de "yo" que creamos y a la que nos aferramos, creyendo que es única, inmutable y completamente formada. Cuando recuperamos esa conciencia innata de ser observador y observado, nos damos cuenta de que el ego es un proceso en constante cambio de lo que percibimos de nosotros mismos y de nuestro alrededor; esto nos abre a niveles de conciencia en los que podemos sentirnos como parte de algo más grande, eliminando la sensación de separación que es la fuente de nuestro sufrimiento. He llegado a ver el valor de los puntos de vista místicos y, aunque todavía me cuesta aceptar la idea de trascendencia absoluta, reconozco la necesidad de experimentar lo desconocido aceptando el hecho de que nada perdura excepto el cambio. Desde un punto de vista psicológico, estas puntos de vista son liberadores, pero pueden crear un tipo de apego diferente. Podemos apegarnos al ideal de la iluminación y la vida espiritual, pasando por alto las necesidades y responsabilidades terrenales que todavía forman parte de nuestra existencia. ¿Dónde está el punto óptimo? Yo creo que esto es una elección: nuestro psique, o me atrevo a llamarlo alma? buscando un estado de equilibrio entre fuerzas opuestas en un estado constante de ambivalencia. Mi punto de vista surge principalmente del trabajo de Carl Jung y el concepto de individuación, definido metafóricamente como el proceso alquímico de convertir el metal en oro. A medida que los alquimistas pelan capas de ego, enfrentando e integrando las sombras que siempre acompañan a la luz y el caos que es la contraparte de la unidad, la esencia de su experiencia subjetiva se revela como una conciencia innata, incognoscible y que sólo puede expresarse simbólicamente. He resonado profundamente con este punto de vista, y gran parte del simbolismo que estoy usando en mi contenido creativo está inspirado en autores junguianos, pero quiero alejarme del enfoque esencialista para fundamentar mis puntos de vista en enfoques más iterativos y multidimensionales. Por lo tanto, utilicé una epistemología fractal para crear la metáfora de la Diosa que yace en el Caos, una conceptualización de "El Misterio" que usa geometría fractal, psicobiología y filosofía oriental. El caos no es dual; cuando nos enfrentamos a nosotros mismos, no encontramos un límite claro entre la mente y el cuerpo; encontramos innumerables estados psicológicos, en su mayoría conflictivos o divergentes, de diferente naturaleza y valor, que tienden a regularse a sí mismos a través de complejos procesos dinámicos.
La Diosa que yace en el Caos es mi interpretación subjetiva de la idea del Ser. Resuene contigo o no, ten en cuenta que cualquier concepto sobre este tema, por mas sofisticado o convincente sea, es solo una representacion simbólica de lo desconocido.

El Misterio El proceso participativo de creación he llamado la Diosa que yace en el caos. Una dinámica multidimensional e infinitamente autorreplicante modelada por el fractal de Mandelbrot, la estructura geométrica que resulta de la iteración continua de la función circular f(x) = x2+c con 0 y números complejos. En la filosofÃa Samkhya, la iteración continua de f(x) representa un ser eterno y en constante evolución que surge con la intersecion de dos realidades ontológicas: Purusha, el Conocedor y Prakriti, el Campo. X=0 representa Purusha. El potencial cuántico, lo no manifestado. La conciencia paradójica que es al mismo tiempo inmanente y trascendente. C representa Prakriti. La compleja dinámica de la existencia, la manifestación energética de un mundo creado por el movimiento constante de tres fuerzas, llamadas Gudas: Tamas (instinto inconsciente), Rajas (poder mental) y Samta (equilibrio desapegado).
Sentiencia Un circuito de retroalimentación termodinámico codificado en organismos vitales. Proporciona una lógica bidireccional y autorreguladora que determina la formación de estructuras y la capacidad de colaborar y adaptarse en función de respuestas hedónicas (avanzar hacia el placer y alejarse del dolor). Tamas: la manifestación biológica e instintiva de Prakriti
Ego El "yo" creado por medio de procesos cerebrales y percepción sensorial, inconsciente del proceso de cambio. La conciencia del ego es Maya, el apego a la mente y la materia; y a instantáneas especÃficas de f(x) que son afirmadas por la interacción social y concebidas como marcadores de identidad. Rajas, la manifestación cognitiva de Prakriti.
Alquimia La cualidad noética de la experiencia subjetiva que crea significado a partir de la fenomenologÃa. Consciente del proceso de cambio y del potencial Cuántico, a la vez observador y partÃcipe de la función autorreguladora. Samta, la manifestación imaginal de Prakriti.